Hace poco aprendí a hacer pompones de lana que utilicé para adornar algunos regalos de Navidad.
La idea era hacerme una cortina de pompones, pero no logré la manera de hacerla, así que la idea se quedó en estos pomponcillos tan graciosos.
Hace un par de semanas, cuando ya había desistido de tener mi cortina, entré en una tienda de chinos y Voilá! vendían madejas de lana de pompones. Abrí unos ojos como platos.
Y tras varios minutos intentando decidirme qué colores me llevaba, me fui a casa con dos madejas, una morada y otra azul celeste preciosa.
Lo que he hecho no es una cortina, ni tan siquiera es un apaño de cortina porque para eso tendría que estar colocada en el umbral de una puerta o en una ventana... pero no en la pared, jeje. Chicas, que quereis que os diga ¡a mí me encanta!.
Mirar que monada de cerca:
Lo más gracioso es que las tengo enganchadas a la pared con chinchetas (upss).
Ya iré perfeccionando la idea, de momento ésta se queda ahí :)
Feliz comienzo de semana!
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