Días Llenos de Vida

Hay un dicho que dice que hay que llenar los días de vida, no llenar la vida de días.

Y es que muchísimas veces parecemos coleccionistas de días, cuando lo que hay que coleccionar son buenos momentos, nuevas experiencias, risas, anécdotas...

¿Cuántas veces habéis tenido la sensación de que el día que habéis vivido hoy es idéntico al día que vivisteis ayer o a los de toda la semana? Y digo idéntico, porque ningún día es igual a otro, parecidos, idénticos, similares sí, iguales no.

Llevaba días pensando en esto. Pensando en que hay personas jóvenes que "han vivido más" que personas de 50 años, y también la otra cara de la moneda (como siempre), personas mayores que saben disfrutar más de la vida que otras mucho más jóvenes.

Todo radica no en cuánto vivas, sino en cómo lo vivas.

Hoy el despertador sonó a la misma hora de siempre, me fui a trabajar como siempre, en el trabajo hubieron momentos tranquilos, momentos de estrés... como siempre, y al salir del trabajo (aquí es cuando normalmente me voy directa a casa) rompí el maleficio del "como siempre" y me fui a una librería. Allí encontré un librito ilustrado precioso, parecía infantil pero al abrirlo y leer la primera página comprendí que era un librito infantil para adultos.

"El abrigo de Pupa" por Elena Ferrándiz. Un librito precioso, con unas imágenes inspiradoras, tiernas y bellísimas que relatan en unas cuántas páginas como:

"Cada mañana se colocaba el abrigo de los miedos, el que tenía desde pequeña y que había ido creciendo a la vez que ella".

Y es que muchas veces llenamos nuestra vida de días por miedo a llenarlos de vida. Como Pupa que tenía miedo a que no la quisieran, miedo a que la quisieran, miedo a que cambie todo, miedo a que no cambie nada, miedo a los demás, miedo de sí misma, miedo a dar un paso, miedo a no darlo,  miedo, miedo,

 miedo...

Así que VIVE, vive, VIVE!!!

Las dos ilustraciones pertenecen a este encantador librito que os he comentado "El abrigo de Pupa", que obviamente me he comprado :)